Cuando uno va a la primera clase, siempre va con las intenciones de sentarse, escuchar, prestar atención y nada mas. Pero esta primera clase fue distinta, se hizo un juego que ayudo a que nos conociéramos con personas que solamente habíamos intercambiado palabras o que ni siquiera habíamos hablado ni visto, a través de simples preguntas como ¿cual es tu color favorito? o ¿que querías ser de pequeño? entre otras. Esto sirvió para romper el hielo y entrar en un ambiente de confianza, de relajarse, reflexionar y aprender de formas distintas a las que siempre vemos.
Después de la pregunta ¿que profesor te inspiro o te marco? se abre otra dinámica y es rescatar cosas buenas que nos hayan dejado profesores a lo largo de nuestra enseñanza y así hacer una lista para ver como es ser un buen docente, que no solo es enseñar y ya, aunque eso sea lo fundamental, si no que va mas en como se trata al alumno, debe ser cercano y humano con sus alumnos, entre otras cosas.
Luego abrimos el tema de "rayar la cancha", de que debe haber respeto entre profesor y alumno, pero no marcar tanto la "autoridad", si no que se debe tener confianza, pero también hay que saber quien es el profesor y quien es el alumno.
Esta clase la encontré interesante, reflexiva y distinta a muchas clases. Me sirvo para darme cuenta de los profesores que pasan en nuestro camino y que si no hubiera echo esta actividad, creo que jamás me daría cuenta lo importante que fueron en mi paso de la enseñanza superior.
No lo dije en la clase, pero todo esto solo me recordaba a mi profesora de artes del colegio, cuando yo le dije "profe, lo siento pero no soy buena para pintar, no soy buena en dibujos, si quiere le saco fotografías" y ella lo acepto con mucho gusto, me pedía cada clase que le trajera fotografías de distintos temas, me incito a que no dejara pasar algo que realmente me gustaba, me llevo a concursos de fotografía y siempre ha estado conmigo apoyándome. Digo siempre, porque el año pasado fue ella quien hablo en mi primera exposición fotográfica fuera del instituto, presento mi exposición y también hablo de como era yo, de todas las cosas que rescato en mi cuando estaba en el colegio y que aun se acordaba.
Reflexionando, esto me sirvió para saber que la enseñanza no es solo sentarse y escuchar, si no que se puede aprender de otras formas mucho mejores y que llegan mucho mas a las personas, me ayudo para escuchar y prestar atención a lo que tienen que decir los demás. A darme cuenta de lo que quiero lograr cuando sea profesora, lograr ser humana, consciente, menos mecánica, ser respetuosa, ordenara, entre otras cosas que rescatamos de nuestros profesores.
"profe, lo siento pero no soy buena para pintar, no soy buena en dibujos, si quiere le saco fotografías" y ella lo acepto con mucho gusto.
ResponderBorrarYo también quiero una profesora así, muy buen referente eh?
"Reflexionando, esto me sirvió para saber que la enseñanza no es solo sentarse y escuchar, si no que se puede aprender de otras formas mucho mejores y que llegan mucho mas a las personas, me ayudo para escuchar y prestar atención a lo que tienen que decir los demás"
me encantó
¿cómo harías esto en tus clases? ¿qué estrategias se te ocurren?
¿y los referentes? ¿cómo integramos tu disciplina?